Escribimos este post al hilo de la finalización de la bebeteca a la que ha ido este año Rafael.
El año pasado tuvimos plaza en la de la Biblioteca José Hierro, de Talavera de la Reina y fue una grata experiencia. Nos encontramos con el trabajo de Mercedes, siempre tan cariñosa con los niños y desarrollando cada semana diferentes actividades para acercar a niños de hasta 3 años a la biblioteca. Su forma de trabajar es en círculo, uniendo los libros con las canciones, el uso de una figura totémica como lo es la muñeca Penélope y una interacción constante con el arte, el uso de cuadros y las manualidades.
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| Penélope, nos da besos al empezar y al marcharse |
La evolución de los pequeños fue asombrosa desde el comienzo allá por octubre al final de la bebeteca en junio. Muy agradecidos a Mercedes y a todo el personal de la José Hierro, desde Dori -su directora- hasta el último de los bibliotecarios y resto de personal que han ayudado en lo que han podido. Resaltar las actividades musicales con el violinista Rafa y las que se hicieron en la Feria del Libro de Talavera.
Este año, tuvimos la suerte de ser admitidos en septiembre en la Biblioteca Niveiro Alfar el Carmen. Con dos grupos en los que hemos ido alternando semana sí, semana no las citas con la biblio, hemos conocido a las dos caras visibles del proyecto: Almudena y Virginia, pero también al resto de colaboradores del centro que han puesto también su granito de arena para que todo saliera a las mil maravillas.
En esta bebeteca el funcionamiento es muy distinto, se hace una apertura con una canción para centrar la atención de los pequeños, luego nos cuentan un cuento hecho con todo lujo de detalles en cuanto a los disfraces de los personajes y la ambientación y después se pasa a trabajar mediante las manualidades y la psicomotricidad cosas relacionadas con el cuento. La sesión acaba con una canción de despedida que al final del curso los niños hacen con gran perfección.
La verdad es que han sido dos experiencias distintas, pero ambas muy gratificantes. El avance es claro y los niños tienen un acercamiento lento pero seguro al mundo del libro. De hecho, en el Alfar, hay que pedir a los niños que dejen los libros para empezar la sesión de la bebeteca.
La interpretación que hacen de los cuentos suele ser bastante libre y los decorados nos han dejado con la boca abierta una y otra vez; el trabajo es brutal y espero que todas las mamis y papis que han acudido cada miércoles, se lleven la misma impresión que nosotros.
Rafael disfruta cada día más de los cuentos y muchas veces recordamos las experiencias que hemos tenido, ya que hemos ido comprando para su propia biblioteca algunos de los libros que íbamos viendo en las bebetecas.
En el próximo curso va a ser ya un cambio, porque empiezan a acudir solos a este tipo de actividades. Esperemos poder seguir yendo a una de ellas, aunque en el cole ya van a empezar con un programa de lectura del que ya os hablaremos, así como el que está haciendo ahora mismo en la guardería.
Estamos felices de ver que se sigue primando el acercamiento de nuestros peques al mundo del libro, que la lectura puede ser algo más emocionante que ponerles un móvil o una tablet delante. Que la lectura ha de ser compartida con ellos, que tienen que vernos leer, que hay que llevarlos a la biblioteca una vez a la semana e invitarles a que busquen sus lecturas o pregunten al personal, que interactúen con otros niños.
